Recomendaciones prácticas para minimizar la mortalidad de corderos en el período neo natal
Entre los aspectos destacados por el profesional están los servicios de otoño (34 días), “por categoría y parición de primavera con esquila pre-parto en agosto y uso de herramientas (peines altos, salvo el cover) para minimizar riesgos de mortandad”. Además, agregó que se debe controlar la sanidad, “con antihelmínticos y vacunación contra clostridiosis”.
Para Bianchi, es importante “marcar los carneros o identificar ovejas por semana de servicio. Haciéndolo adecuada y diariamente, sabremos con razonable grado de exactitud semana de parición y ovejas falladas”. Sostuvo que esta medida “es fundamental para economizar comida y ser eficiente en el abrigo sólo a las ovejas que lo requieren”, al tiempo que sugirió “restringir el uso de ecografía, sólo cuando las expectativas de mellizos sean mayor del 10%”. Al referirse al descarte de ovejas pre-servicio, mencionó “ubre, ovejas viejas y obviamente, problemas sanitarios, especialmente en las patas”.
Asimismo, resaltó la virtud de “lotear por estado corporal en gestación avanzada –favorecer mellizas, borregas de primera cría, viejas y ovejas con condición corporal <2,5, independientemente de la carga fetal–”. De nuevo, como al servicio, mencionó el uso de antihelmíntico y vacunación contra clostridiosis.
Si no se esquila pre-parto, Bianchi explicó que debe efectuarse “limpieza de ubre y entrepierna 30 días antes de la fecha probable de partos, para favorecer el acceso a la ubre inmediatamente de nacido el cordero”. Indicó la utilización de “suplemento energético (0,5 kg/animal/día) última semana pre-parto a los efectos de aumentar la cantidad del calostro y favorecer la extracción por parte de los corderos, al hacerlo más fluido y menos espeso”.
Los productores deben tener en cuenta la “reserva de potreros para parición, previendo comida, sanidad del potrero –para lo cual se recomienda pastoreo previo con vacunos recurriendo a categorías adulta– y eventualmente abrigo. Parición aparte de borregas y ovejas”.
Hizo hincapié en las “recorridas diarias –en lo posible de mañana y tarde– para evitar eventuales dificultades al parto”, citando como ejemplo “cordero pesado, mala presentación, oveja débil, etcétera”. De ser posible y si no se dispone de cortinas arboladas, “se debe encerrar o proteger inmediatamente antes del parto hasta los tres días post parto, particularmente a las mellizas”.
Bianchi destacó la utilización de perros de guarda “improntados”, como el Mastín del Pirineo o Maremmano-Abrucense, con el propósito de evitar ataque de perros salvajes y zorros de cuatro y dos patas.