En frigorífico Casa Blanca aguardan el inicio del trabajo del interventor
La situación del frigorífico Casa Blanca SA (Fricasa) está en un momento de impasse, aguardando que desde el juzgado, en donde se están analizando los documentos enviados desde la empresa, esté todo correctamente especificado, para luego ser enviado a la Liga de Defensa Comercial (Lideco), que designará un interventor que comenzará a trabajar junto a la empresa, procurando soluciones, tras el pedido de concurso voluntario de acreedores. Para la empresa es muy importante la presencia del síndico, porque hasta su llegada, no se pueden tomar determinaciones trascendentes en el caso de la compra de haciendas para la faena u otros aspectos, además de analizarse las deudas contraídas por la industria y de qué forma se procurará subsanarlas. Al tiempo de anunciar la decisión de ir a Concurso Voluntario, Fricasa se comunicó con los mercados a los que abastecía –China, Chile y Estados Unidos–, para comunicarles que no podría seguir abasteciéndolos hasta encontrar una solución a su situación. Pero el principal problema en la actualidad es lograr abastecer a las carnicerías propias de Fricasa. Están ubicadas en su mayor porcentaje en Paysandú, pero también había abasto en la capital y otras ciudades departamentales. La determinación de la empresa fue “liberar” a las carnicerías de Paysandú y que puedan comprar carne de otros abastecedores.
DEUDA
Es de conocimiento público que la situación de frigorífico Casa Blanca cambió con el streaming realizado por Pablo Carrasco, que al dar a conocer la problemática de Conexión Ganadera, declaró que Fricasa mantenía una deuda de 27.700.000 de dólares, lo que posteriormente fue aclarado desde la industria, de que la misma era de 25.500.000, pero no con esa empresa, sino con Gustavo Basso. Lo que se conoció en las últimas horas, es que la deuda con Conexión Ganadera supera los 7.400.000 dólares y con sucesores de Gustavo Basso alcanza a los 17.000.000, a pesar que figura la misma dirección. También se conoció en estos días, que varias empresas sanduceras acreedoras están presentando sus reclamos, y que en sumatoria son de varios millones de pesos. En el caso de productores y consignatarios, la deuda es en dólares, y también suman varios cientos de miles de dólares.
TRABAJADORES
Quienes no la están pasando nada bien son los trabajadores. Desconocen si podrán y cuando, cobrar la primera quincena trabajada en el mes de febrero. Esos jornales entienden son importantes porque el 28 de febrero cobraron lo que les correspondía por el BPS, pero apenas lo recibido osciló entre 2.000 y 6.000 pesos. Los 80 funcionarios que continúan trabajando no tienen la certeza de cobro, debido a que sostienen, “desconocemos si el síndico que aún no fue designado habilitará a la empresa a los pagos, ya que al pasar a concurso voluntario de acreedores no podría sacar dinero para los sueldos”, indicaron desde el sindicato de trabajadores. Por lo tanto, su situación preocupante se suma a los 81 funcionarios que lograron que se les habilitara el seguro especial, quienes recién cobrarían en el mes de abril. “Imaginate un pueblo sin dinero y soluciones a esta problemática”, enfatizaron. “No sabemos si vamos a cobrar y cuándo lo poco que trabajamos en febrero, y encima lo que nos corresponde por el pago del seguro es muy poco. Todo se va a hacer cuesta arriba”, precisó.
POSIBLE VENTA
Quienes están en el rubro de la carne y el sector ganadero, coinciden en que la salida para la viabilidad de la empresa es su venta, a pesar de que desde el directorio de frigorífico Casa Blanca SA se buscan otras alternativas, que la pongan nuevamente en funcionamiento. Una de las salidas podría pasar por su arrendamiento, ya que hay una industria instalada en el país que lo propuso. Esto posibilitaría que continúe funcionando y los funcionarios trabajando. Pero depende de la decisión que tome la sindicatura.