Francia se opone al acuerdo UE-Mercosur en defensa de su agro
El Primer Ministro francés, Gabriel Attal, declaró que Francia “se opone a la firma” del acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Mercosur, que lleva años de negociaciones y pone en debate cuestiones medioambientales, pero principalmente el riesgo de competencia desleal de los productos sudamericanos, que denuncian los agricultores franceses.
En medio de una crítica situación por las protestas de los productores rurales, Attal anunció la anulación de la “suba del gasoil destinado a la agricultura” prevista en Francia y anunció “diez medidas de simplificación” de los trámites administrativos, en respuesta al enfado de los agricultores del país, que cortaron los accesos a París.
Durante su discurso, de pie frente a un pajar, el jefe del Gobierno hizo numerosos gestos de comprensión hacia los agricultores. “No vamos a renunciar a vosotros”, concluyó, “vamos a luchar también a nivel europeo para que las cosas avancen”. Y tras criticar a “aquellos que oponen la defensa de nuestros agricultores a la defensa del medio ambiente”, Attal accedió a una de las principales reivindicaciones de los manifestantes: la anulación del aumento del impuesto sobre el gasóleo no de carretera utilizado con fines agrícolas, que debía aumentar progresivamente hasta 2030, aunque se había incluido en el presupuesto de 2024.
El jefe del Gobierno, que intenta desactivar la ola de protestas de los agricultores, también prometió un “shock de simplificación” de la administración, con “diez medidas inmediatas”. Citó en particular el “saneamiento de los cursos de agua agrícolas” y los “plazos de recurso para los proyectos agrícolas”.
La intervención del Estado francés
También pidió que se apliquen correctamente las leyes francesas destinadas a proteger los ingresos de los agricultores en las negociaciones con fabricantes y supermercados. “En los próximos días”, el Gobierno “impondrá sanciones muy severas” a tres empresas que no respetan estas leyes, anunció Attal, que también prometió reforzar los controles. El Primer Ministro también anunció un esfuerzo para acelerar las ayudas de urgencia, especialmente en el caso de la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), para la que el Estado francés aumenta del 80% al 90% el reembolso de los tratamientos veterinarios. Esta enfermedad, transmitida por mosquitos picadores, afecta principalmente a cérvidos y bovinos. La gran mayoría de los focos se concentran en las regiones de Pirineos Atlánticos y Altos Pirineos, en el suroeste de Francia.